Crea un gimnasio para entrenar sin salir de la parcela
En los últimos años han proliferado los espacios dedicados a gimnasio en comunidades de vecinos, pero también en hoteles, universidades y otros lugares
Sería, sin duda, el sueño para muchos. Sobre todo, para aquellos que, cuando llega la hora de ir al gimnasio, sienten gran pereza por tener que salir de casa (sobre todo en invierno), realizar el correspondiente desplazamiento…
Pero en los últimos años las cosas han cambiado. ¿Eres de los que le gustaría tener un gimnasio en tu comunidad de vecinos? Sería, sin duda, el mejor remedio para muchos: puedes entrenar sin salir de casa, ahorrando tiempo y dinero, compartiendo tu afición con tus vecinos…
Ahí va la buena noticia: no es una utopía. De hecho, es una realidad cada vez más frecuente en muchas comunidades de vecinos que deciden crear su propio espacio de fitness. Y, en muchos casos, son incluso las propias constructoras las que, durante los trabajos para dar forma a esas comunidades, contemplan la adecuación de un espacio para el entrenamiento de los fututos moradores.
En este artículo te vamos a contar las muchas ventajas de tener un gimnasio en tu comunidad de vecinos y también las necesidades que debes de tener en cuenta para hacerlo realidad.
- Lo decíamos al inicio: sería un sueño hecho realidad para muchos. Tan solo tienes que ponerte la ropa deportiva, coger una botella de agua y una toalla, y bajar. En un tiempo no superior a 5 minutos puedes comenzar. Sin desplazamientos, esperas ni aglomeraciones. Además, podrás elegir el horario que mejor te convenga y adaptar tu rutina a tus necesidades.
- Podrás ahorrar el dinero que gastarías en una cuota mensual o anual de un gimnasio externo, así como en transporte, aparcamiento o gasolina. Además, al ser un espacio compartido, el coste del equipamiento y del mantenimiento se reparte entre todos los vecinos, lo que supone una inversión rentable a largo plazo.
- Es, sin duda, la principal ventaja: el deporte es salud. Así que podrás mejorar tu salud física y mental y, de este modo, prevenir enfermedades y reducir el estrés. Además, tendrás más facilidad para mantener la constancia y la motivación: tienes el gimnasio a la puerta de cada (literalmente).
- Al igual que en los espacios deportivos, en el gimnasio de la comunidad de vecinos tendrás la oportunidad de fomentar la convivencia y la cohesión y, con ello, crear un ambiente más agradable y solidario.
Las ventajas de contar con un gimnasio en la comunidad de vecinos son incuestionables. Así que el siguiente paso consiste en conocer todo aquello que necesitas para ponerlo en marcha.
- Lógicamente, debes contar con un espacio adecuado para instalar el equipamiento y permitir el movimiento de los usuarios. El espacio debe estar bien ventilado, iluminado y aislado acústicamente. También debe cumplir con las normativas de seguridad y accesibilidad vigentes.
- Debes establecer un presupuesto realista y ajustado a las posibilidades económicas de la comunidad de vecinos. Debes tener en cuenta el coste inicial del equipamiento y del acondicionamiento del espacio, así como el coste posterior del mantenimiento, la limpieza y el consumo eléctrico.
- Debes contar con el acuerdo y el apoyo de la mayoría de los vecinos para llevar a cabo el proyecto. Debes informarles sobre las ventajas, las necesidades y el presupuesto del gimnasio, así como de las normas de uso y convivencia que se deben respetar. También es imprescindible establecer un sistema de gestión y control del gimnasio que garantice su buen funcionamiento.
- Es, sin duda, la esencia del espacio que quieres crear. Es fundamental elegir el equipamiento que mejor se adapte al espacio disponible y a las preferencias de los usuarios. Debes tener en cuenta el tipo de entrenamiento que quieres ofrecer (cardiovascular, fuerza, funcional, etc.), la calidad, la durabilidad y la funcionalidad del equipamiento, así como el servicio técnico y la garantía que te ofrece el proveedor.
En este punto tenemos otra buena noticia: es posible crear un espacio de estas características con equipamiento de primera calidad, porque algunas de las grandes marcas, como BH Fitness, prestan este servicio. A caballo entre el mercado doméstico y el profesional, la compañía vasca cuenta con una línea específica para comunidades de vecinos, hoteles, universidades, espacios de entrenadores personales y otros emplazamientos de esta naturaleza.
BH Fitness comenzó a trabajar hace aproximadamente 15 años en esta línea y, según destaca Ángel Gavilán, comercial de la firma, ha crecido de manera exponencial en los últimos tiempos, lo que permite a la compañía incorporar nuevas referencias para que estos espacios de entrenamiento cuenten con la mejor dotación.
En relación a las comunidades de vecinos, Gavilán explica que en muchos casos trabajan directamente con las constructoras, que ofrecen la zona de gimnasio como una prestación más de la comunidad, lo que le aporta un gran valor de modo que, añade, en algunos lugares se está convirtiendo prácticamente en una instalación de obligada creación.
Así que, si tu comunidad dispone de espacio suficiente para poner en marcha un gimnasio, recuerda que en Soinva, además de contar con socios de primer nivel como BH Fitness, trabajamos para dar las mejores soluciones a nuestros clientes. Esa es nuestra misión: hacerte la vida más fácil. Ayudarte a crecer, a mejorar tu calidad de vida.